Hoy te propongo un ritual fin de año. Hace unos días hablábamos del miedo, en concreto de la dignidad del miedo (https://espiraldelmar.com/la-dignidad-del-miedo/). Hoy te propongo seguir con la compañía de tu parte temerosa – sabia para entrar en 2017 con la mirada puesta en conseguir nuestro sueño.
Para ello te propongo que sigas estos pasos (sí, lo sé, estás en plenos preparativos para la cena de esta noche…)
1. Cierra tus bonitos ojos por unos instantes.
2. Siente, visualiza: ¿cuál es ese proyecto, ese sueño al que le das vueltas una y otra vez y que nunca acabas de poner en marcha?
Recréate en la visualización, intenta hacerlo con todo lujo de detalles.
3. Ahora que ya tienes definido tu sueño, ¿qué es lo que te asusta de ponerlo en marcha? ¿Qué te da miedo de conseguirlo?
Para saberlo, visualiza a tu parte miedosa, asustada. Imagínala como tú, allá en la distancia. Visualízala: ¿cómo está corporalmente? ¿cómo es su mirada, su respiración, su voz? Pregúntale… pregúntale de qué tiene miedo, qué es lo que le preocupa.
4. ¿Qué habilidades o recursos necesitas para dejar de tener miedo a la hora de conseguir tus proyectos?
Una vez le has escuchado, pregúntate: ¿qué habilidades o recursos necesitas tener para dejar de tener miedo? Recuerda que sentimos miedo cuando consideramos que el peligro al que nos enfrentamos es mucho mayor que los recursos que tenemos.
5. ¿Cuáles de esas habilidades o recursos ya posees?
6. ¿Cuáles necesitas desarrollar? ¿Cómo puedes hacerlo?
¡¡Ahora viene el ritual fin de año!!
7. Prepara en el suelo un espacio en el que quede una especie de camino.
Más o menos en la mitad del camino, pon dos piedras (o dos cojines) a cada lado del camino. El espacio entre ellas simbolizará la puerta por la que pasarás al finalizar 2016 y empezar 2017.
8. Instantes antes del fin de 2016, visualiza a tu parte miedosa.
Visualízala allá a lo lejos. Pídele que se acerque. Mírala a los ojos, dile que de ahora en adelante vas a atenderle, a escucharle, que agradeces la sabiduría que te aporta.
Recuerda las veces que te has quedado paralizado por el miedo, que no has avanzado en tus propósitos, las veces que has olvidado tu sueño.
Di en voz alta que ya no vas a hacerlo más.
9. Atraviesa la puerta y toma las habilidades que has visto que necesitas, como si fuesen un objeto.
Imagina que las puedes coger físicamente. Agradece el haberlas recibido, ¡¡son un don!! Toma la decisión de utilizar las que ya tienes desarrolladas, y comprométete para desarrollar las que aún no tienes.
10. ¡¡Ve a por tu sueño!! No te desvíes del Camino.
¿Te animas a probar?
Paz